Antes de ver este Reel en Instagram, nunca había pensado en comer comida georgiana. Tampoco sabía nada de ella. Pero ya que el restaurante mencionado se ubicaba en Madrid y planeaba ir a Madrid, inmediatamente puse “probar la comida georgiana” en mi lista de cosas para hacer.* La comida georgiana en Madrid—¿en serio? puedes pensar. Yo digo, “¡SÍ!”
Es importante notar que aquí estoy refiriendo a Georgia, el estado soberano, el país. No Georgia, el estado de EEUU. Las cocinas entre el estado soberano y el estado de EEUU son dos cosas diferentes. Y este artículo no servirá como comparación de las dos. Es solo un refrito desenfadado de mi experiencia probando comida del estado soberano por primera vez.
Si eres estadounidense, es posible que nunca hayas oído de ese país. Si es así, ve a buscar el país y entonces regresa a este artículo. Pero si has oído del país, procede con este artículo.
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30 de julio: Después de un vuelo transatlántico desde Filadelfia hasta Madrid, estaba cansadísima. Tenía que descansar en una cama real después de más o menos 24 horas sin dormir. Mi plan era probar comida georgiana en el primer día de mi llegada. Y lo hice sí. Deja que te haga la crónica de la experiencia.
Lo primero es lo primero: pedí una bebida georgiana que se le denomina Tarkhuna. Tiene un sabor de estragón. Pero para mí, sabía a una mezcla de Sprite y Mountain Dew. Quiero decir que no sé mucho de Mountain Dew. Lo he bebido solo varias veces en mi vida. Pero recordaba el sabor, así que pensaba en Mountain Dew.
Tarkhuna provocó un regusto placentero de menta. Lo mejor de esta bebida es que no hay alcohol. Ya que no tengo ni interés en tomar alcohol, ¡me gustaba mucho! Me sentía cara sin tomar alcohol, y eso fue un gran sentimiento.
Lo siguiente que comí fue una ensalada se le denomina Djonjoli. Es de brotes de soja. La textura era bastante diferente de la que comía en casa, porque no como ese tipo de ensalada en casa. Sin embargo, los sabores de vinagre, cebolla, y coriander hicieron memorable la ensalada. Definitivamente la comería otra vez.
Ahora es hora de anunciar el plato estrella, el sello de cocina georgiana: Jachapuri (Khachapuri).
Dios mío, el pan: ¡súper auténtico! La yema de huevo se mezcla con el queso de motu propio, pero realmente no podía notar el sabor del huevo. La única razón por la cual lo recordaba (el huevo) fue porque del color amarillo dentro del pan. Aún así disfruté de Jachapuri con su sabor a queso y espero comerlo de nuevo en el futuro.
Y por fin, el postre y el último plato: baklava. Sabía diferente de lo que había esperado. Pensaba que el baklava era un postre suave, pero las capas eran bastantes firmes. Admito que no fue tan duro comer ni cortar con un tenedor. Me gustaba su dulzura, pero la textura no me gustaba de verdad. Estaba un poco decepcionada, porque veía las fotos de baklava y pensaba que era un postre buenísimo. Pero lamentablemente, no es ese tipo de postre en mi opinión.
¿Me arrepiento de probarla? No, para nada. Pero si la mayoría de las baklavas sepan así como así, no me imagino comerla de nuevo.
En definitiva, me alegro mucho haber tenido esta experiencia. Si tuviera más dinero, probaría más platos georgianos. Chvishtari, Elardji, Mtsvadi, Khinkali—la lista sigue. ¿Cómo podría no? Puedo y lo haré. Y por supuesto, planeo ir a Georgia algún día para probar los platos en su hábitat nativo.
Si hay un restaurante georgiano cerca de ti, planea un viaje allí para probar la cocina georgiana por ti misma. No te arrepentirás en absoluto. Prometo yo.
*No fui al restaurante mencionado en el Reel de IG, pero me gustaría ir ahí algún día. Acabé ir a un restaurante que se le denomina Kinza, otro restaurante georgiano en Madrid.
The English version of this article is available. Click on this link to read it: https://sweetsimplicity16.com/trying-georgian-food-for-the-first-time/
